Cindy Shine es llevada a prisión y ahí la llevan a la sala de interrogación. Los hombres no son hombres de la ley, son chacales que al ver a la chica indefensa no tienen ningun inconveniente en forzarla a chuparles las pollas y follarle el coño como si ella fuese una muñeca de trapo. los hombres usan el cuerpo de la chica como quieren, con la impunidad que les da el uniforme