Soy una zorra muy, muy pervertida y un coño muy fuerte y comer mi propia leche me hace estar súper caliente y me corro cada maldita vez, hay algo realmente especial sobre el sabor de mi propia leche, ¡me encanta! Sí, gano un poco de peso desde que di a luz, pero todavía tengo bastante calor, ¿no? De todas formas, disfruta viendo cómo me vuelvo loca con mis juguetes, chupando mis tetas y comiendo mi propia leche, ¡te encantará mi programa, lo prometo!